Litigante

Una confrontación a la vida y la muerte

Sinopsis

Silvia, madre soltera y abogada, está al borde de una crisis nerviosa. Debe dividir su tiempo entre cuidar a su hijo pequeño, acompañar a su madre enferma y defenderse de una acusación por corrupción. Justo en ese momento, cuando menos se lo espera, el amor llama a su puerta por primera vez en años.     

Director: Franco Lolli

RESEÑA

Una confrontación a la vida y la muerte

Sin ser una abogada juzgada por corrupción, madre soltera o acompañante de un paciente con cáncer, cualquier espectador se puede llegar a sentir identificado con Silvia, interpretada por Carolina Sanín, reconocida escritora.

Litigante cuenta la historia de Silvia, una abogada que termina en un problema legal por cubrir los platos rotos de su jefe que se ve envuelto en un lío de corrupción, debe hacerse cargo de su pequeño hijo que se está viendo afectado por la ausencia de un padre y debe acompañar a su madre Leticia que está en un tratamiento de quimioterapia y por el sufrimiento de éste decide no seguirlo. Este es el principio de los tantos enfrentamientos que tiene Silvia y Leticia para convencerla de continuar y dar la pelea a la enfermedad, de esta forma todos los habitantes de la casa comienzan un proceso de acompañamiento del padecimiento desde la empleada, la hermana menor María José hasta Antonio,el hijo de Silvia.

La cotidianidad define el estilo de Franco Lolli en la mayoría de sus proyectos y esta es una de las muestras donde más se hace evidente, a pesar de no tener grandes acciones, Litigante mantiene todo el tiempo la atención y el vínculo hacia Silvia y Leticia, interpretado por la madre del director, una mujer que ya ha pasado por experiencia propia un proceso de quimioterapia donde se muestra asi misma según la escritura del director y su personaje no es más que sentirse identificado con algún familiar.

Lolli afirma que hace un homenaje a su madre con esta película y puede que por esta razón se le haya facilitado retratar a una mujer de la forma tan pura y respetuosa en que lo refleja desde todos sus matices, la manera en que ambas enfrentan las derrotas que a pesar de su fortaleza dejan caer su coraza y buscan ayuda en su familia aunque saben que pueda ser contraproducente.

Gracias al gran trabajo actoral de Sanín y el manejo de los planos la angustia de altos y bajos mantiene vivo al personaje demostrando lo abatida que está por tantas situaciones, de cómo una mujer decide renunciar y saber que se va a quedar sin nada, la aparición de Abel, interpretado por Vladimir Durán, (director de “Adiós entusiasmo” película ganadora del Ficci en 2017) llega a su vida para alivianar los golpes y la conduce a una evolución de ella, nos muestra a una mujer que quiere sentir y cambia su rol maternal, que empieza por cierta indiferencia en halloween, uno de los días favoritos de los niños, a tomarse una tarde con su hijo gracias a una cita que tiene con el novio y se autoevalúa maternalmente. Las situaciones que le suceden y tanto afectan esta relación madre - hijo demuestran que todo es cíclico, Silvia le reclama a su madre por cómo es con ella pero ella cómo está siendo como madre y es cuando el nombre Litigante toma forma.

De nuevo Lolli habla de una relación madre e hijo como lo hizo en el cortometraje “Como todo el mundo” en este caso una relación de típico adolescente que pelea con la mamá, cortometraje que augura su carrera. El tema de las discusiones entre estos que está siempre presente y las secuelas de personalidad que se les tiende a culpar a los padres cuando se es adulto y que las peleas van y vienen en ese hogar pero a pesar del fuerte carácter que demuestran, el amor siempre prevalece y queda como resultado en todas las situaciones.

“El amor es la mejor defensa” es el tagline de Litigante, pues el amor es el tema, idea y premisa, es lo que mueve todo el tiempo esta historia.